Juan Carlos Díaz Lorenzo

El País titula en su edición digital de hoy: “Una unidad militar ayudará al desalojo por el volcán de El Hierro”. Firman la crónica Rafael Méndez y Pedro Murillo. Es la información más extensa que hemos leído hasta el momento en los diferentes medios de comunicación. Se refieren los citados periodistas, con absoluta claridad, a un volcán y todo parece indicar a priori que de eso se trata.

Otro apoyo informativo importante lo encontramos en los medios informativos regionales –más cautos en los titulares-, en la página web del Instituto Geográfico Nacional (IGN) y en twitter y facebook, caso de Actualidad Volcánica de Canarias (AVCAN) y Volcanes de Canarias (volcanesdecanarias.com).

La isla de El Hierro, a vista de satélite

En una de las informaciones más reciente que hemos consultado en AVCAN, se observa que el “epicentro ponderado” se sitúa ahora en el mar, al sur de El Julan, con respecto a los anteriores. En nuestro caso concreto, la memoria nos hace evocar la erupción del volcán Teneguía, acaecida hace ahora 40 años en nuestro pueblo natal, Fuencaliente de La Palma.

El asunto tiene, como nuestros lectores pueden comprender, máxima actualidad y atención preferente en Canarias, hasta el punto de que el Gobierno autónomo ha asumido la portavocía científico-técnica en colaboración con los expertos, parte de los cuales, nacionales y extranjeros, ya que se encuentran en El Hierro.

Las autoridades, ya sean locales, insulares y regionales, mantienen su mensaje de calma mientras la tierra se mueve bajo los pies de los habitantes de la isla, que tienen la preocupación reflejada en sus rostros, como no podría ser de otro modo. A través de las redes sociales están llegando multitud de mensajes de apoyo a los herreños.

Panorámica del valle del Golfo, sede del municipio de Frontera

Atendiendo a las indicaciones desde que el 23 de septiembre el semáforo de riesgo volcánico pasó a nivel amarillo, los habitantes de El Hierro han recibido puntual información y se han provisto de lo indispensable para facilitar su evacuación, especialmente a los habitantes de Frontera, caso necesario.

Los expertos en estas lides entienden que el comportamiento geológico que se produce es el típico de la fase previa de un volcán, aunque advierten que la bolsa de magma latente bajo la corteza insular podría finalmente no salir a la superficie. En algunas zonas se ha detectado una alteración de la superficie insular debido a la presión ejercida desde las profundidades.

Anoche, como medida preventiva, la Guardia Civil procedió al desalojo de 53 vecinos –de 300 inicialmente previstos- ante la posibilidad de desprendimientos que pudieran causar daños. Los vecinos –la mayoría de los cuales se han alojado en casas de familiares- proceden de Las Puntas, El Lunchón, Pie Risco, Los Corchos y Guinea. También se ordenó el cierre del túnel de Los Roquillos, que enlaza Frontera y Valverde, por lo que las comunicaciones terrestres se hacen por la antigua carretera de la Cumbre. Hoy no hay clases para los escolares en el valle de Frontera, por las mismas causas. Todo ello con absoluta normalidad.

Los volcanes prehistóricos dominan parte del paisaje de El Hierro

Este mediodía, en un viaje especial del fast-ferry Bonanza Express, han viajado a El Hierro efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del 112, para ayudar en labores de prevención y en todo lo que sea necesario. El primer viaje ha consistido en el embarque de cuatro guaguas y seis camiones, así como 31 militares, para una primera evacuación de la población de Frontera –caso necesario- hasta el cuartel situado en La Caleta, próximo al aeropuerto insular. El Ministerio de Defensa responde así a una petición formulada por el Gobierno de Canarias, dado  el cambio de tendencia de las últimas horas. Para esta tarde se espera la visita de la ministra Chacón, que viene a supervisar el despliegue.

La Dirección General de Seguridad y Emergencias desplaza un Puesto de Mando Avanzado (PMA), para actuar como centro de coordinación operativa de las distintas unidades que estén interviniendo, dotada de un vehículo con los más modernos sistemas de comunicaciones. También está previsto un primer contingente de efectivos de la unidad de tierra del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), que trabajarán en el establecimiento de comunicaciones, gestión del PMA, filiación de personas, logística y rescate.

El Servicio de Urgencias Canario (SUC) desplazó el martes personal de enfermería encargado de organizar el traslado de personas de edad avanzada y con patologías sensibles. El SUC dispone de una ambulancia de soporte vital básico y una Unidad Móvil de Catástrofes. Hay, también, una primera dotación de Cruz Roja con tres camiones con remolque, uno de ellos con un puesto sanitario, dos vehículos con remolque y dos ambulancias, una de ellas tipo 4×4, así como un vehículo para transporte de personas.

Esta mañana se celebró una reunión en la sede de Capitanía Marítima, en Santa Cruz de Tenerife, con los representantes de las compañías navieras, para actuar coordinadamente en caso de que fuera preciso un plan de evacuación de los habitantes de la isla, ante el incremento de la actividad sísmica asociada a volcanismo. Otro tanto se ha hecho en otras instancias con las compañías aéreas que pueden operar en el aeropuerto de El Hierro. Como los lectores pueden apreciar, el despliegue es importante y pone de manifiesto la capacidad de prevención y respuesta que tiene el Gobierno de Canarias, en colaboración con el Ministerio de Defensa y otras instituciones.

Parajes volcánicos antiguos del oeste de la isla de El Hierro

El Hierro, como todas las islas del archipiélago canario, es de origen volcánico y se trata, desde el punto de vista geológico, de la más joven. El paisaje insular está sembrado de viejos conos volcánicos y la presencia de lavas se hace especialmente notable en el sur y oeste de la isla, en el silencioso y majestuoso entorno del faro de Orchilla, referencia del antiguo Meridiano Cero.

Las investigaciones científicas han determinado que la última erupción volcánica registrada en El Hierro se produjo en 1793, en el paraje conocido como Lomo Negro. Lo llamativo del caso es que no existen crónicas del acontecimiento.

Desde el 19 de julio, en que los sismógrafos del IGN detectaron los primeros movimientos sísmicos, se han registrado más de ocho mil, la inmensa mayoría imperceptibles para la población. Sin embargo, en los últimos días han aumentado en frecuencia e intensidad, de los cuales 79 han registrado entre 2 y 3,8 grados de magnitud.

Coladas de lavas cordadas localizadas en el oeste de El Hierro

De la curiosidad inicial de que no iba a ocurrir nada, se ha pasado al temor de que algo puede suceder. Por lo que leemos en la crónica de El País, los sismógrafos del IGN detectaron a las 03,59 h de hoy un movimiento de magnitud 2,3 a sólo dos kilómetros de profundidad, aunque este dato no es concluyente y está sujeto a revisión por si se tratara de un error de medición, pues hasta el momento la mayoría se han registrado entre 12 y 15 kilómetros de profundidad.

Los científicos están muy pendientes de la subida del hipocentro, que es uno de los signos que permiten saber si el magma está subiendo a la superficie. El 25 de septiembre se registraron dos movimientos a cinco kilómetros de profundidad y el día 19 uno a tres kilómetros.

Mientras tanto, la tierra sigue moviéndose en El Hierro. Puede pasar cualquier cosa, como dice el investigador Rafael Abella (IGN), en declaraciones que recoge El País. “Que todo se calme o que surja una erupción en el mar y nadie se entere hasta que la lava afecte al oeste de la isla. Pero también puede que no ocurra nada en semanas o años. Nadie sabe con certeza qué ocurre con el magma”. Así, pues, por ahora toca esperar el curso de los acontecimientos.

Fotos: NASA, Eckhard Pecher, Barraquito (flickr) y volcanesdecanarias.com

Juan Carlos Díaz Lorenzo

Hasta el momento de publicar este artículo, los medios informativos de Canarias informan en sus ediciones digitales, citando despachos de las agencias Efe y Europa Press, la noticia de que en la isla de El Hierro se han producido hoy 14 seísmos de magnitud entre 1,6 y 3,5 grados, siendo éste registrado a las 10,32 horas. Se suman, así, a los más de ocho mil movimientos detectados desde el 17 de julio por el Instituto Geográfico Nacional (IGN).

Se dice con claridad que estos movimientos sísmicos pueden ser precursores de una erupción volcánica, la cual, caso de producirse, según los científicos, “sería de muy baja explosividad y con una incidencia espacial pequeña” y la equiparan similar a la del volcán Teneguía, ocurrido en octubre de 1971 en Fuencaliente de La Palma.

El vulcanólogo José Luis Barrera, vicepresidente del Colegio de Geólogos, dijo que “en El Hierro no se conocía una crisis de terremotos tan grande como ésta desde 1793. Se cree que entonces, tras una crisis sísmica que sintió la población, hubo una erupción al oeste porque se recogieron restos de lava reciente, pero la gente no vio el volcán».

Localización de los movimientos sísmicos producidos en El Hierro

“La magnitud de los seísmos crece, pero también aumenta la profundidad. Empezaron a una profundidad entre 9 y 13 kilómetros y ahora están entre 12 y 15. Eso es sorprendente porque antes de una erupción volcánica los terremotos ascienden”

«Los seísmos se están dando en un pasillo norte-sur que coincide con erupciones volcánicas previas. ¿Se está reactivando una gran fisura eruptiva? Parece que es así, pero no lo sabemos. Crisis sísmicas como esta las hay en el mundo con frecuencia. El 90% se quedan en nada, pero puede ser. En 2004 en Tenerife hubo una crisis similar».

José Luis Barrera insiste en que en caso de erupción volcánica hay tiempo para prepararse: «Se ha visto que la roca se está rompiendo, pero no que suba el magma. Al contrario que los terremotos, las erupciones avisan, siempre hay datos claramente preeruptivos. Aquí no se están dando, al menos de manera evidente».

No hay muchos precedentes conocidos porque la serie de medición sísmica en Canarias tiene solo unas décadas: «Cuando el Teneguía entró en erupción, en 1971, no estaba desplegada la red sísmica allí y el aviso lo dio una base de Estados Unidos en La Palma». Y concluye diciendo que “hay que estar vigilantes pero no alarmar a la población”.

El Hierro es la isla geológica más joven de Canarias

Las autoridades políticas y científicas están desde hace algún tiempo en alerta ante la evolución de los acontecimientos. Protección Civil, Gobierno de Canarias y el Cabildo de El Hierro están informando a la población de cómo realizar una evacuación en caso de que se produjera una hipotética erupción volcánica. Si así fuera, existe un plan de emergencia en el que AENA y la Autoridad Portuaria están avisados ya que afectaría a los aeropuertos y al tráfico marítimo.

La situación en El Hierro es nueva para sus habitantes, pese a que Canarias es la zona activa con mayor riesgo de vulcanismo en España. Desde el 17 de julio, el IGN ha detectado movimientos sísmicos con epicentros localizados al norte y al sur de la dorsal noroeste de la isla y en profundidades que oscilan entre 10 y 14 kilómetros.

El catedrático de vulcanología de la Universidad Complutense, Eumenio Ancochea, señaló que una eventual erupción volcánica en el Hierro podría provocar que «la isla se llene de turistas interesados en estos fenómenos». La probabilidad de que se produzca «es de cerca del 10 % y el riesgo para la población es mínimo ya que el tiempo de reacción es muy amplio. Es normal que la gente esté asustada, pero la realidad es que no hay ningún peligro».

Imágenes: Instituto Geográfico Nacional y GRAFCAN

Juan Carlos Díaz Lorenzo

Desde mediados del pasado mes de julio se viene registrando un número muy elevado de sismos de baja intensidad y otros más notables en la isla de El Hierro. Hasta el momento se contabilizan más de 7.500 movimientos, cuyo origen, según apuntan los científicos, puede ser la existencia de una bolsa de magma fresco localizada a unos 12 kilómetros de profundidad.

De tal “enjambre sísmico”, un porcentaje muy elevado no han sido perceptibles para la población de la Isla del Meridiano, que sin embargo sabe de su existencia por las informaciones publicadas en la página web del Instituto Geográfico Nacional (IGN), en los foros científicos y en los medios de comunicación.

La detección de esta sucesión de sismos ha puesto en alerta a la comunidad científica y desde entonces técnicos del Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) y del IGN han ubicado instrumentación precisa para saber mejor qué es lo que está sucediendo. Para ello se trabaja en tres direcciones: la deformación del terreno a través de una red de estaciones GPS, la actividad sísmica con los sismógrafos y los gases volcánicos detectados mediante estaciones geoquímicas.

Localización del "enjambre sísmico" en la isla de El Hierro

Hasta el momento se han registrado datos anómalos en el “enjambre sísmico” y la deformación del terreno, pues los magmas relacionados con la isla de El Hierro se generan a una profundidad entre 16 y 29 kilómetros, mientras que la actividad anómala de movimientos de magma en la parte inferior de la corteza oceánica se localiza entre 10 y 12 kilómetros de profundidad.

Es posible que sea el indicio de una futura erupción volcánica o pueda estar relacionado con los movimientos tectónicos locales. Hay momentos en los que la actividad se vuelve más difusa, lo que indica una mayor componente tectónica y menos magmática, de ahí que, pese al elevado número de sismos, dicen los entendidos que se trata de un “proceso normal” en una zona volcánica activa, como es el Archipiélago Canario.

Los científicos hablan en estos momentos de una erupción poco probable, pero, obviamente, no es imposible. Lo cierto es que la intensidad de algunos movimientos ha ido subiendo y el viernes 23 de septiembre se produjo un sismo de magnitud 3 y con epicentro en el suroeste de la isla.

Panorámica del valle de El Golfo, municipio de Frontera

Se estima que a dicha profundidad se está produciendo un “proceso de ignición de roca fundida” y el movimiento de magma provoca sobrepresión sobre las rocas que lo encajan, lo cual rompe la bolsa y genera tal sismicidad, según opinión de Joan Martí, geólogo del CSIC y secretario general de la Asociación Internacional de Vulcanología.

A pesar de que aún no existe un peligro real de una erupción volcánica –y en ello coinciden dos científicos antagónicos, Juan Carlos Carracedo y Nemesio Pérez-, el Gobierno de Canarias cambió hoy de verde a amarillo el semáforo que se incluye en el plan de protección ante este tipo de circunstancias, a tenor de las variaciones sismo-volcánicas que se están produciendo principalmente en el valle de El Golfo, formado por un espectacular deslizamiento gravitacional. Es decir, El Hierro en alerta, lo que no quiere decir alarma.

Epicentros de gravedad de los sismos ponderándolos en función de la energía liberada

El color amarillo supone que la población debe prepararse caso de una evolución desfavorable del fenómeno. Por ello se les está informando de qué debe hacer en este caso y consiste, fundamentalmente, en estar pendientes de las instrucciones de las autoridades y de los medios de comunicación. Las autoridades, siguiendo las indicaciones de los técnicos, están atentas a cualquier indicio previo de una erupción volcánica, como el incremento de la magnitud de los seísmos o del dióxido de carbono.

La decisión es una consecuencia de lo establecido en el Plan Específico de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico (PEVOLCA), considerando las conclusiones del comité científico, en las que tiene en cuenta los cambios apreciados en la energía sísmica liberada y en las deformaciones del terreno.

La naturaleza actuará como lo hace siempre y con cierta antelación sabremos si habrá o no erupción volcánica. Parece, a veces, que los mortales de estas islas nos olvidamos de que vivimos sobre volcanes. Sólo en el siglo XX se produjeron tres erupciones: una en Tenerife (1909) y dos en La Palma (1949 y 1971). En el caso concreto de El Hierro, y aunque no se han encontrado crónicas que lo atestigüen, algunos autores sostienen que la última erupción registrada en la isla más joven de Canarias se produjo en 1793.

Imágenes: Instituto Geográfico Nacional (IGN) y Actualidad Volcánica de Canarias (AVCAN)